La energía solar es una de las fuentes renovables con mayor potencial, de la cual hemos aprendido a sacarle un gran provecho. Ejemplo de aquello, son las instalaciones que permiten alimentar tanto tu casa como al sistema de energía.
Esto puede traer varios beneficios, tanto medioambientales como a la economía familiar.
Los paneles que se instalan en las casas (preferentemente en los techos, para captar limpiamente la luz solar) se llaman “paneles fotovoltaicos”. Los paneles están formados de muchas celdas solares, las cuales son pequeñas células hechas de silicio cristalino y/o arseniuro de galio.
En palabras simples, todas las celdas solares trabajando en conjunto reciben los rayos solares y con ellos, hacen que se produzca un campo eléctrico en el panel solar, generando energía que posteriormente podemos utilizar como electricidad.
Ésta entra a la casa a través de un inversor, que la transforma en energía utilizable en nuestra red (de 220v). Si llegara a producirse un exceso de energía, éste es devuelto al sistema.
Según lo publicado, lo primero que se debe considerar es la visita de un especialista para ver la factibilidad de realizar la instalación. Luego, la empresa ofrece distintos kits, dependiendo de la cantidad de energía que se genera.
También hay que tener en cuenta las batería. El sistema lo que hace es alimentar unas baterías, las que después alimentan el hogar. En ellas se contiene la energía capturada por los paneles y tienen una vida útil de 4 años aproximadamente.
¿Cuánto se recupera?
Aparte del beneficio medioambiental, de otorgar energía eléctrica al sistema de manera sustentable, esto también tiene un beneficio directo a la economía familiar. El ahorro puede ir desde los 168.540 pesos (1.500 kWh anuales a $112,360 pesos -tarifa BT1) hasta los 505.620 pesos (4.500 kWh anuales a la misma tarifa).
Instalando paneles solares, puedes ahorrar desde $112.360 hasta $505.620 pesos al año.
Sacando los cálculos, la inversión podría recuperarse en entre 8 y 14 años, dependiendo del sistema de paneles que se desee instalar. Además si generas más luz de la que consumes, no se te cobrará en tu boleta y el “saldo a favor” se traducirá en un descuento en la boleta siguiente.