Calefacción y frío solar
Llamamos ‘frío solar’ al aire acondicionado ecológico, que gracias al consumo de energías limpias puede representar un ahorro de hasta un 70% de la energía. La energía solar se emplea para producir este aire acondicionado eco a través de dos métodos: se recolecta mediante paneles fotovoltaicos que activan los equipos de frío, o mediante colectores solares que son ellos mismos quienes producen la energía térmica a baja temperatura. Eso para el verano. En invierno, la calefacción también puede ser solar, como comentábamos en el apartado anterior: gracias a sistemas solares térmicos, donde se calienta el agua, que se puede acumular para calefacciones o incluso para piscinas temperadas. Por otro lado, hay quien lo tiene todo en uno, con paneles solares capaces de almacenar energía y convertirla en frío o calor, según se necesite.
Los calentadores solares aprovechan la energía del sol y la transforman en energía térmica mediante el uso de líquido o aire, al tiempo que los calentadores de agua solares utilizan el agua como un método para la transferencia térmica. Además, estos sistemas de calefacción solar pueden ser pasivos o activos. En el primero caso son sistemas que utilizan la circulación natural, mientras que con los sistemas activos, se utilizan las bombas para hacer circular el agua y generar calor.