La energía solar es aquella que procede de los rayos solares. Esta estrella emite una radiación electromagnética que llega a la Tierra en forma de luz y calor. Cada año nuestro planeta recibe 180 billones de kilovatios de potencia procedentes del Sol, aunque una parte se devuelve al espacio por la reflexión que produce la atmósfera. Esto se traduce en que en un día soleado a la superficie terrestre puede llegar 1 kilovatio por metro cuadrado.
El sol lleva alumbrándonos 4.543.000.000 de años y la comunidad científica considera que aún lo hará por quinientos mil más. Debido a su carácter inagotable, actualmente es uno de los recursos energéticos renovables o recursos naturales inagotables más importantes en el mundo. La energía solar es una fuente de energía alternativa sostenible y que tiene un menor impacto ambiental; no genera residuos ni emite gases tóxicos. Sin embargo, tiene el inconveniente de que la luz del sol es intermitente y no llega por igual a todas las zonas del planeta.
Para qué sirve la energía solar
La energía solar tiene numerosas aplicaciones, tanto en el mundo natural interactuando con todos los seres vivos, como en la economía humana. El sol nos proporciona a todos los seres vivos luz, energía y calor, pero los humanos sacamos más provecho para nuestro estilo de vida. Con esta energía conseguimos electricidad, calor, transporte y mucho más.